La popularidad de la sofrología
Los sofrólogos suelen trabajar en consultas privadas, solos o en asociación con uno o varios médicos de otra disciplina.
El sofrólogo también trabaja a domicilio.
Trabajan con ancianos, mujeres al final del embarazo, etc.
Las personas con dolores o discapacidades se alegran de tenerlo en casa.
También viaja en privado a hospitales, residencias de ancianos y centros de recuperación postoperatoria, por ejemplo…
También puede funcionar por videoconferencia, como ocurrió durante el cierre.
Algunos optan por trabajar en escuelas, desde el parvulario hasta la enseñanza superior.
También encontramos profesionales de la sofrología en hospitales, maternidades, SPA, centros de vacaciones, residencias de ancianos, centros de bienestar, empresas, etc.
A veces es una madre la que ha decidido convertirse en sofróloga para ella y su familia.
Algunas profesiones, como médicos, matronas, enfermeros, fisioterapeutas y directores de empresa, optan por potenciar sus áreas de especialización con la sofrología.
Trabaja individualmente y en grupo.
La sofrología tiene su lugar en todas partes y para todas las edades …
Póngase en contacto con
Por correo electrónico – isabellemetais.re@gmail.com
La profesión de sofrólogo implica necesariamente una transformación personal, hacia el equilibrio y la armonía interiores, un trabajo sobre uno mismo.
Hay una ley fundamental:
«Sólo puedes dar y transmitir lo que posees en tu interior, aquello en lo que te has convertido».
A lo largo de su carrera, conocerá a personas con preocupaciones muy diversas. La sofrología no sólo se ocupa del estrés...
Atraerás de forma natural a personas afines a ti
Si ha resuelto sus preocupaciones o está en proceso de hacerlo, todo irá bien, pero si no…
¿Cómo reaccionará?
Estar supervisado a lo largo de tu práctica y tu carrera es un punto fuerte.
La escucha rogeriana garantiza que los intercambios previos y posteriores a la sesión sean neutrales, sin prejuicios, impersonales y afectuosos.
Es algo que se puede aprender.
Es lo que has aprendido, en lo que te has convertido, lo que te convertirá en un buen profesional capaz de obtener resultados y perdurar en el mercado laboral…
Asegúrate de ir bien preparado y acompañado:
– para evitar hacerte daño a ti mismo y
– para evitar hacer daño a los demás.
«Uno transmite lo que es. Un buen sofrólogo es alguien que es, no alguien que hace…».
Isabelle Métais
Trabajar en uno mismo lleva tiempo, a veces años.
Así que lo que cuenta no es el tiempo que pasas en la escuela, sino el tiempo que pasas contigo mismo.
Esta es la ventaja de estar acompañado a distancia a largo plazo, estés donde estés sin tener que desplazarte.
La ventaja de la formación a distancia es que tienes la oportunidad de ser supervisado y apoyado durante todo el estudio y el autoaprendizaje.
La formación presencial sólo dura lo que dura el curso (de 6 meses a 1 año, según la escuela).
Por tanto, es esencial encontrar un supervisor que se adapte perfectamente a ti.
¿Cómo encontrar una buena escuela?
Habla con los profesores: ¿son alegres, sonrientes, están a gusto consigo mismos, tranquilos y serenos, ecuánimes y en paz consigo mismos?
En resumen, ¿viven con la sofrología o es sólo un trabajo para ellos?
¿Te sientes bien en su compañía?
¿Te tranquiliza su compañía?
Escucha a tu corazón y síguelo. «SÓLO puedes transmitir lo que posees en el fondo.
Las virtudes, los valores de un profesional de la Sofrología (lo que emana de él) son:
- Neutralidad
- Tolerancia
- Escuchar
- Buena voluntad
- No juzgar
- Autoobservación
- Serenidad y calma
- Alegría y dulzura …